El nacimiento y proliferación de los bosques urbanos en ciudades de todo el mundo se está convirtiendo en una de las herramientas claves del urbanismo contemporáneo. El reto de luchar contra el cambio climático y promover la sostenibilidad ambiental y económica en las urbes pasa por generar pulmones verdes más allá de los tradicionales parques.
Bosques urbanos: herramienta clave para la sostenibilidad y el bienestar en las ciudades
Los bosques urbanos son más que un conjunto de árboles dispersos y ahogados entre el ruido del tráfico y las multitudes cruzando las aceras. Su creación contribuye de manera sustancial a una vida más saludable.
Un bosque urbano se basa en la plantación de especies de árboles autóctonas, conociendo los parámetros actuales de biodiversidad urbana y seleccionando aquellas que enriquecen el patrimonio arbóreo de la ciudad.
Implican la mínima intervención arquitectónica y no son espacios aislados sino accesibles y abiertos al mundo. Tanto es así que en ellos se contemplan zonas recreativas para facilitar esos vínculos y conexiones emocionales con los habitantes de la ciudad.
Más que árboles: pulmones verdes para las ciudades del futuro
Más allá de la creación de microclimas dentro de las propias urbes, los bosques urbanos conllevan numerosos beneficios para sus habitantes. Tan solo un árbol absorbe hasta 150 kg de CO₂, reduciendo la contaminación del aire y los efectos del cambio climático como la isla de calor. Además, las arboledas funcionan como pantallas protectoras del ruido, favorecen el régimen de lluvias y mejoran la salud física y mental de las personas, disminuyendo la tensión arterial y el estrés.
Los bosques urbanos también permiten la reintroducción completa de especies locales, adaptándose adecuadamente a las condiciones de la propia ciudad, mejorando la biodiversidad y creciendo con más rapidez.
Casos de éxito Exploramás sobre bosques urbanos
Todo ello ha sentado las bases para distintas y numerosas iniciativas de asociaciones, ONGs y empresas para una mayor presencia de los bosques urbanos. Proyectos siempre en línea con el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) marcados por la ONU y su Agenda 2030 sobre el Desarrollo Sostenible.
Concretamente, el número 11 promueve “la urbanización inclusiva y sostenible y la capacidad para la planificación y la gestión participativas, integradas y sostenibles”, además de “reducir el impacto ambiental negativo per capita de las ciudades, incluso prestando especial atención a la calidad del aire”.
Mijas, zona de reforestación y crecimiento sostenible
Esos objetivos, basados en el impulso de la naturaleza en las ciudades, van de la mano de desafíos medioambientales y sociales que brotan en las empresas como nuevas semillas y se convierten en realidades.
La silvicultura urbana -consistente en el cuidado y manejo de árboles individuales y en conjunto en entornos urbanos- permite materializar esas iniciativas. De ahí el nacimiento de proyectos como el que, desde Exploramás, impulsamos en el municipio malagueño de Mijas hace menos de un año.
Siendo este nuestro hogar natal y donde se ubica una de nuestras principales sedes, desde Exploramás decidimos apostar por la creación de un bosque urbano con más de 400 árboles autóctonos en la zona de la calle Doma y los alrededores del Hipódromo de Mijas. Un proyecto que no hubiese sido posible sin la compañía RavenPack y la colaboración del ayuntamiento del municipio de la Costa del Sol.
En nuestro objetivo de reforzar vínculos entre los trabajadores de las empresas a través de la sostenibilidad y la educación ambiental, más de 150 compañeros conscientes de ello se unieron en la plantación de cientos de alcornocales durante una jornada completa.
Tras un año de teletrabajo con motivo de la Covid 19, que ha impedido trabajar codo con codo en los mismos espacios, decidimos implicar a los empleados de Ravenpack en esta acción de reforestación conjunta, promoviendo una actividad basada en la colaboración y la sostenibilidad.
La creación del bosque urbano contó, por supuesto, con la guía y coordinación de técnicos ambientales para la planificación, rodalización, valoración de la calidad de la planta de la semilla y preparación del suelo, entre otros aspectos claves.
Este proyecto fue impulsado igualmente gracias a la labor de Ashes To Life, compañía de cosmética ecológica certificada que promueve transformar la ceniza que surge de los incendios forestales en productos sostenibles.
Conscientes de las desoladoras consecuencias de estas agresiones ambientales, como el de la Costa del Sol en 2012, Ashes To Life participó activamente en la creación del bosque urbano.
Con el objetivo de mejorar los entornos sociales, económicos y ambientales, la compañía se sumó al trabajo de reforestación en el que se plantaron más de 400 alcornoques, una de las especies autóctonas de la zona mediterránea.
Árboles con nombre propio
En esta misma zona de Mijas, y continuando con nuestro reto de reforestación inclusiva, también se ubican casi un centenar de árboles con nombre propio. Y es que los trabajadores de General Electric contaron con Exploramás para poner en marcha otro proyecto: los premios anuales a los ingenieros de su equipo que trabajan en el área de las energías del futuro.
Desde General Electric querían galardonar a 70 de sus empleados y hacerlo con un premio sostenible. Tras varias propuestas sobre la creación de un galardón creado con material reciclado, nació una idea en el seno de Exploramás que realmente se alineaba con ese reto: plantar un árbol en nombre de cada empleado y geolocalizarlo.
Cada uno de ellos recibieron las coordinadas de su árbol. Un legado sostenible que conectó a los trabajadores con esos árboles que crecen en una pequeña colina en Mijas.
Desde Exploramás pretendemos que las empresas con las que trabajamos no solo descubran nuevas emociones y experiencias desde el punto de vista corporativo. El objetivo es llevar a cabo eventos responsables y que impliquen una retribución personal y social.
Exploramás – Experiencias con Propósito
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