Pocas ciudades hay en el mundo que cuenten con una red de mercados como la que tiene Barcelona. Hasta un total de 43 mercados tiene la Ciudad Condal, equipamientos que trascienden la actividad comercial, testigos de la transformación de la ciudad, focos de la evolución social y económica de sus habitantes, supervivientes de los cambios del comercio y de las nuevas formas de consumo.
Son, sin duda, un atractivo más de un destino de fama mundial que no deberías pasar por alto en tu visita, viaje de incentivo o evento corporativo. Team building, tours, gymkhanas, rutas de tapas, transfers originales o un simple paseo. ¿Cómo incorporar los mercados de Barcelona a tu actividad para empresa?
Mercados de Barcelona
Primer Mercado de Barcelona
El emplazamiento de la actual Plaza del Àngel albergó el primer mercado abierto de Barcelona. Se ubicó al otro lado de la muralla romana y en torno a él fue organizándose un epicentro comercial formado por pequeños puestos, tiendas y talleres de diversa índole.
Poco a poco fueron surgiendo otros mercados, la actividad en ellos fue transformándose. La especialización y el sedentarismo fueron fenómenos que propiciaron este cambio así como la irrupción de los intermediarios como agentes de mayor relevancia.
La mejora de los medios de transporte y el crecimiento de la población incrementaron la oferta de productos. Y todo ello acabó dando lugar en un concepto diferente de mercado, un emplazamiento reservado y cubierto. El primer de ellos fue el Mercado de Santa Caterina.
Tipos de Mercados en Barcelona
La ubicación geográfica de Barcelona, su fácil acceso marítimo, su historia han propiciado la proliferación de estos enclaves comerciales estratégicos. Actualmente, de los 43 centros que hay en Barcelona, 39 de ellos son Mercados de Alimentación y 4 son Mercados de Otras Temáticas.
Mercados de Alimentación
Mercado de La Boquería
El Mercado de San José (Mercat de Sant Josep) es el más famoso de Barcelona. Más conocido como el Mercado de La Boquería, su fama trasciende las fronteras y le sitúa como un atractivo de indiscutible visita en la Ciudad Condal.
Fue inaugurado en 1840 aunque originariamente surgió en la Pla de la Boquería, frente a las puertas de la antigua ciudad, como un mercado al aire libre de vendedores ambulantes y labradores de pueblos y masías.
Hoy en día aglutina más de 300 puestos repartidos en un laberinto de más de 2500 metros cuadrados trufado de sabores, olores y colores. Pescados y mariscos; aves, charcutería y carnicería; frutas, verduras y legumbres; colmados, salazones y conservas; platos cocinados y especialidades.
La Boquería es un lugar de visita imprescindible en el que descubrir, adquirir y degustar Barcelona. En 2005, fue elegido como el mejor mercado del mundo, distinción otorgada en el Congreso Mundial de Mercados celebrado en Washington. Y este mismo año 2017, la CNN lo ha situado como uno de los mejores mercados del mundo en uno de sus reportajes.
No te vayas sin probar: los chipirones con huevos fritos, las croquetas caseras, la butifarra o las catanias.
Mercado de Santa Caterina
Surgió en 1845 y, al igual que en el caso de La Boquería, su emplazamiento albergó anteriormente un convento (en este caso, el Convento de Santa Caterina). En la posguerra, sirvió de centro de abastecimiento a ciudades próximas a Barcelona.
En 2005 concluyó la reforma de sus instalaciones llevada a cabo por el equipo de arquitectos de Enric Miralles y Benedetta Tagliabue. De su nuevo aspecto destaca su reconocible tejado ondulado y colorista, de gran visión cenital, en el que se incrusta un mosaico de colores, inspirado en el trencadís gaudiniano, que representa la fruta y las verduras, y las escamas del pescado que en él se venden.
Durante las obras de remodelación del Mercado de Santa Caterina, aparecieron restos arqueológicos del antiguo convento que pueden visitarse en el subsuelo del propio mercado, como parte del Museo de Historia de Barcelona.
Desde 2008, este mercado está hermanado con el Mercado de Leicester.
No te vayas sin probar el cochinillo, el revuelto de setas y la paella.
Mercado Princesa (Mercat Princesa)
Es un espacio que atrapa. Fue un palacio y hoy es un paraíso gastronómico ubicado en El Born. La luz inunda la escena alrededor de arcos y paredes de piedra y contribuye a crear un ambiente singular en un mercado de amplia oferta culinaria (casi una veintena de ‘paraditas’ se despliegan por la instalación).
La leyenda del mercado relata una historia de amor y traición. con la princesa Constanza de ‘mediadora’ entre la hija de un noble y un navegante genovés naufragado en esta tierra (puedes conocer más sobre la leyenda del Mercado Princesa aquí).
No te vayas sin probar: los Pintxos vascos y las mini pizzas.
Mercados de Otras Temáticas
Aunque incluyen la gastronomía en su oferta interior (o en los alrededores), estas instalaciones destacan por el comercio de otro tipo de productos distintos. Destacamos dos de ellos:
Mercado dels Encants (Mercat dels Encants de Barcelona)
Es uno de los más antiguos de Europa que aún mantienen su actividad. Aunque su origen no está del todo claro, está acreditada una historia de más de 7 siglos. En él, se celebraban subasta públicas y ventas al ‘Encante’ ya en el año 1200. Parece que este tipo de venta procedía de la costumbre de subastar los bienes de los difuntos con tal de conseguir dinero para pagar las posibles deudas y donar el sobrante a la viuda.
El mercado tuvo diferentes ubicaciones durante siglos hasta que en 2006 se aprobó su nuevo emplazamiento: en el Bosquet Dels Encants, junto al Teatro Nacional. Se estrenó la nueva ubicación en septiembre de 2013, bajo una cubierta de 24 metros de altura repleta de espejos.
Uno de sus grandes atractivos es la subasta que tiene lugar en él todos los lunes, miércoles y viernes de 7.00h a 9.00h lo que le convierte en el único mercado de Europa en el que aún se mantiene esta modalidad de venta.
Gastronomía, artesanía, alta tecnología, segunda mano (mobiliario, ropa, libros, discos, maquinaria,…) y antigüedades están muy presentes en el Mercado dels Encants que recibe a la semana unas 100.000 visitas.
Mercado de La Concepción (Mercat La Concepció)
Es el mercado de las flores por excelencia. Su origen data de 1888 y está ubicado en el barrio del Eixample. Un siglo después, en 1998, fue remodelado. El edificio es uno de los exponentes de la utilización del hierro en la arquitectura catalana.
En su oferta, destaca el espacio destinados a la floristería, un área que permanece abierta todos los días de la semana durante 24 horas. Aunque, por supuesto, hay espacio para la gastronomía y la venta de productos autóctonos.
Actividades para empresas con visita a Mercados de Barcelona
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